El otro día iba al cine bastante escéptica “¿otra de Spiderman?” y finalmente me sorprendió gratamente, no tanto por la trama, sino por el reparto, mejorando muchísimo con respecto a las películas anteriores, (que para mi gusto, tenían un Peter Parker muy ñoño y una Mary Jane bastante seria). En esta, Spiderman sigue siendo un pringadillo, pero que tiene su gracia y su punto canalla, y Gwen Stacey, la chica de turno, es más dulce y a la vez con un toque rebelde que te hace simpatizar más con ella. Pero sobre todo me ha gustado por la increíble química entre los protagonistas. ¿Pero cómo no va a haber química si también son pareja en la vida real?
Por un lado el pelazo de Andrew Garfield, que sin ser un guaperas resulta atractivo (para más información consultar “Atractivo vs guaperas”) y por otro una perfecta Emma Stone, que de pelirroja me gusta más, pero que está guapa de todas las maneras.
Como no podía ser de otra forma, lo que más llamó la atención de los chicos durante la película fue ella. Guapísima, divertida, con carácter, transmite una enorme seguridad en sí misma (de hecho me ha sorprendido descubrir que sólo tiene 23 años) y además es una grandísima actriz. Si es que esta chica lo tiene todo. Es más creo que se le da menos bombo del que se debería, así que aquí es donde entro yo en acción, cual abuela ("mirad qué guapa es mi nieta"):
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La saga de Spiderman con Toby Maguire me gustó tanto que no pienso darle ni siquiera una oportunidad de verla a esta última película.
ResponderEliminar.Estelle.
me encanta Emma Watson desde que la vi en "rumores y mentiras", me parece muy mona...
ResponderEliminarbesines